Cuando vamos a adquirir nuestra vivienda existe una serie de mecanismos o herramientas que nos permiten conocer mejor las virtudes y problemas del que posiblemente sea el bien más caro que compraremos en nuestra vida.
Algunos de ellos son obligatorios, como el certificado energético, que nos indica el nivel de eficiencia del bien inmueble. Otros, como la inspección del edificio por parte de un técnico de edificación (arquitecto o aparejador) que nos alerte de posibles problemas constructivos, de instalaciones, de orientaciones, ruidos, etc., son muy recomendables, ¿o alguien se compraría un coche de segunda mano sin una revisión mecánica previa?
Pero otro factor muy relevante, a la hora de considerar la mejor opción, de cara a invertir en nuestro futuro hogar, es conocer los servicios con los que cuenta en su entorno próximo. Más concretamente, a una distancia no mayor de 15 minutos caminando, es decir, aquellos equipamientos a los que somos capaces de acceder fácilmente, recorriendo una corta distancia a pie, sin necesidad de tener que contar con ningun medio de locomoción, ni siquiera el transporte público.
La ciudad de 15 minutos. Fuente: Nomada Urbana SC |